Parece ser que lo que se contagia y lo que se aprende con facilidad es lo malo, sobre todo si no existen reglas y correctivos para los que dejan de cumplirlas
Está muy claro que no puede tenerse ni un limpiador ni un vigilante detrás de cada persona, ni preparado para cuando a alguien le apetezca tirar algo al suelo, recogerlo de inmediato
Pero también está muy claro que la ciudad debe de estar limpia y aseada como cualquiera de nuestras viviendas, es la vivienda de todos y entre todos debemos guardarnos respeto
Hoy pase un mal momento por no enfrentarme a una señora en el autobús, pero opte hace algún tiempo por callar pues además de la educación también hemos perdido la vergüenza y por decir también pasé malos momentos
La señora del autobús, con mucho anillos en los dedos y con mucho auricular en las orejas, tuvo necesidad de usar un pañuelo y tal y como lo uso, abrió la ventanilla del autobús y lo arrojo por ella, esto lo hizo en tres ocasiones, saco un Caramelo del bolsillo y tal y como le quito el papel repitió la operación de tirarlo por la ventanilla. Podemos imaginar si todos los que vamos en el autobús hiciéramos lo mismo, pero no solo en el autobús los ciudadanos deben concienciarse de que por la calle no debe tirarse ni un papel, ni una bolsa de basura, ni una colilla ni nada que ensucie pues contra su libertad de hacerlo esta mi derecho y el de muchos como yo a tener una ciudad en condiciones
No merece una multa, merece una escoba y un tiempo limpiando las calles de la ciudad, ¡ah! Y a ser posible con uniforme de Lipasam
Voy a hablar del Parque de María Luisa
Que podemos decir de los pintores frustrados, que van por todos los sitios garabateando y escribiendo “Frases de amor y odio” que desde luego demuestran su falta de sensibilidad como personas y apostillo ensucian lo que a todos los demás nos cuesta pagar para que se limpie. Puestos a no respetar no tenemos ni siquiera conciencia del valor de las cosas y mucho menos del daño que infringimos, me decía una empleada del Parque de María Luisa que limpiar las columnas del Pabellón de Alfonso XIII en la isleta de los patos costaba muchísimo por el material de que estaban hechas
La sensación que da cuando uno la visita y la ve en tal estado es para llorar, en una ciudad que quiere atraer y vivir del turismo, aunque dicho sea de paso también hay reseñas de personas de fuera, seguramente habrán pensado es una moda o una costumbre, pero…. Tan faltos de sensibilidad y educación como cualquiera que lo haga
Tampoco escapan los que se llevan el bocadillo o la tortilla o la botellona la verdad es que en medio del campo que parece uno estar en determinadas zonas de este parque, tomarse una tortilla no está mal, pero eso no está reñido con recoger la bolsa y los vasos y servilletas y todo lo que se haya usado y ponerlo en una papelera, que las hay y dejaremos el espacio en condiciones de que sea usado por otra persona que llegue detrás. Siempre debe pensarse en los demás y en uno mismo, como le gusta encontrar el sitio donde va a permanecer un tiempo
Puestos a repasar tampoco estaría de más que los señores que tienen su negocio de caballos y carruajes, retiraran la suciedad que hacen sus animales, además de oler mal molesta a la vista y los que sufrimos no tenemos participación en sus ganancias, pero si en aguantar sus molestias, esto podemos aplicarlo también a los dueños de los perros, deben de sentirse muy orgullosos de utilizar un parque que cuesta un dineral simplemente su mantenimiento para que sea receptáculo de las casas de su perro y…. que representan una molestia para los que no tenemos perro, incluso para los que teniéndolo las recogen, por sensibilidad, por educación, por no molestar e incluso en una demostración de querer algo más a su perro
Tengamos presente que estamos hablando de un parque que tiene una catalogación como monumento y de espacios que son dignos de respetar por su valor y por su encanto y debería de articularse acciones que concienciaran a la gente a respetar, de momento pienso que sería mejor gastar en vigilar que en reparar y limpiar
Si investigamos un poco comprobaremos que tanto el parque de María Luisa, como la Plaza de España son mundialmente conocidos, ¡por favor! Respetémoslos
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